NO HAY PROFETA MÁS GRANDE QUE MOISÉS
Nos dice el Eterno de que nunca habrá alguien como Moisés (Números 12:6-8). Luego Moisés antes de morir nos dice que el Eterno iba levantar un profeta como él. ¿A qué se estaba refiriendo él al decir eso? Ya que el Eterno nos dice que nunca habría profeta como él (Números 12:6-8). El pueblo tiene necesidad de un Profeta, ya que prefirió que D.ios les hablara por medio de alguien y no directamente. Entonces es obvio que Moisés les aseguraba de que siempre había de haber alguien, que al igual que él recibiría mensajes del Eterno para comunicárselo al pueblo, esto no es una contradicción. Sí habrá profeta; Sin embargo, la única similitud entre Moisés y ese o esos profetas futuros se limitaría al hecho de que todos recibirían mensajes para comunicárselo al pueblo, en cambio, Moisés sería el único que pudo comunicar cara a cara con el Eterno.
La Torá explica la Torá, no hay que inventar interpretaciones. Sabemos que Moisés se refería a eso, porque también en Deuteronomio 13 nos explica con una advertencia que sólo tendríamos la obligación de escuchar a los profetas que se levantarán después de él si sus enseñanzas no son contrarias a la Torá; y en Deuteronomio 13:3-4 nos dice: “No les darás oído a las palabras de tal profeta, ni al tal soñador de sueños”, entendido que se trata aquí de alguien que venga enseñando con cosas contrarias a la Torá; lo cual leemos en el verso 4: “En pos del Eterno su D.ios andarán, y a Él temerán, y guardarán sus mandamientos, y escucharán su voz, y a Él servirán, y a Él se pegarán.”
Está claro que nadie, ni aun el profeta tiene autoridad de cambiar o modificar ningún mandamiento. Deuteronomio 4:1-2 “Ahora pues, oh Israel, escucha los estatutos y decretos que yo les enseño, para que los ejecuten, y vivan, y entren, y posean la tierra que el Eterno el D.ios de sus padres te da. No le añadirán a la palabra que yo les mando, ni disminuirán de ella, para que guarden los mandamientos del Eterno su D.ios que yo les ordeno.”
Por lo tanto, hace bien todo Judío por no darle oído a las enseñanzas del Nuevo Testamento, ya que sus enseñanzas son contrarias a la Torá. Por ejemplo en Mateo 11:11 y en Lucas 7:28 dice que Juan el Bautista es más grande que todos los profetas incluyendo a Moisés, y sigue diciendo que aun el más pequeño de sus seguidores es más grande, dejando a entender así que todos los seguidores de esas enseñanzas son más grandes que Moisés, eso es una herejía muy grande, ya que D.ios mismo nos dice que no hay nadie como Moisés (Números 12:6-8). Y de que si alguien enseñara algo contrario a la Torá, no sólo no los debemos escuchar, tenemos aún la obligación de apedrearlos, porque enseñan rebeldía. Deut 34:10 “Y nunca más se levantó profeta en Israel como Moisés, a quien haya conocido al Eterno cara a cara”.
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